Empresas y particulares trabajan en múltiples ocasiones con datos o documentos confidenciales que precisan un tratamiento que garantice una mayor seguridad y privacidad con el objetivo de evitar que estos se filtren o terminen haciéndose públicos. Si la información deja de ser útil, bien por su carácter obsolescente, porque pierdan su valor para el negocio, o bien hayan superado el plazo límite legal de conservación; debemos proceder a su destrucción a través de empresas especializadas en destrucción de documentos.
Particularmente, existe una serie de documentos o informaciones que deberías destruir de manera segura. Entre ellos, se encuentran:
Documentos que contengan información que te identifique
Nombre y apellidos, contratos, licencias de cualquier tipo, mail, número de la seguridad social…todos ellos son datos susceptibles de ser robados e información muy útil para los llamados ladrones de identidad.
Mientras no sea estrictamente necesario no compartas o publiques dichos datos en ningún sitio. Lleva contigo los documentos imprescindibles para identificarte y guarda el resto en un lugar seguro. Cuando dejen de ser de utilidad, destrúyelos. Cualquier dato puede ser una mina de oro para los ladrones de identidad.
Documentos que incluyan números de cuenta
Los datos bancarios y números de cuenta suelen acaparar gran parte de la atención de los ciberdelincuentes. Existe una práctica entre ellos conocida como phishing, que consiste en engañarte para que desveles datos personales útiles para tener acceso a números de cuenta, tarjetas de crédito, etc.
Usuarios y contraseñas
Es importante llevar un control exhaustivo de este tipo de informaciones, si un pirata informático tiene acceso a las mismas, quedas totalmente expuesto. Descarta poseer documentos que recojan todas y cada una de tus contraseñas cuando no sea imprescindible.
Debes ser especialmente cuidadoso cuando utilices rede Wifi abiertas y por supuesto no compartir información relevante a través de las mismas. Evita realizar compras o acceder a datos bancarios.
Mailing publicitario o correo comercial
Tras la entrada en vigor del nuevo RGPD (Reglamento General de Protección de Datos), es más sencillo protegerte de este tipo de e-mails. Simplemente debes ponerte en contacto con la empresa en cuestión, dar tu negativa ante la posibilidad de recibir este tipo de correos y pedir que eliminen tus datos personales de su lista.
Datos fiscales
Nunca depositar este tipo de informaciones en contenedores de reciclado de papel normales, puesto que pueden ser susceptible de ser robadas. Guarda la información en un lugar seguro mientras te sea útil, y cuando deje de serlo, destrúyela de forma segura.